La Mente Subconsciente y el Poder de la Fe

La fe es la síntesis mental, emocional, física y espiritual de un pensamiento positivo sostenido, conscientemente aceptado, y la mente subconsciente puede llevar por medio del poder de la fe a cualquier persona que entrene su mente a lograr hazañas increíbles en su vida. No obstante, cuando se oye hablar de fe muchas personas o una vasta mayoría piensa que solo se aplica a temas religiosos y otros asocian la palabra fe con una creencia popular de gente ignorante, ingenua y que tiene poca educación o desarrollo mental.

Sin embargo, la fe es un elemento clave y fundamental para la búsqueda, desarrollo y consolidación de una vida exitosa en cualquier aspecto de la vida del ser humano, dado que en el universo exiten trillones de eventos invisibles a nuestros ojos que afectan nuestra vidas y que por medio de la fe y la cuarta ley de la mente subconsciente que explicamos en nuestro Curso Libro Las Cuatro Leyes de la Mente Subconsciente y su Aplicación para Triunfar™ se pueden ordenar y hacer que trabajen a nuestro favor.

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La fe tiene varias definiciones, pero una de las más importantes y aplicables está en la biblia en la cita de Hebreos 11 «La fe es la certeza de lo que se espera y la convicción de lo que no se ve». Unido a esta definición magistral, en términos de la mente subconsciente la fe es un estado mental y emocional de aceptación permanente de un evento, una creencia, una circunstancia o un periodo de tiempo donde se cumplirá uno o varios eventos o hechos esperados.

Recordemos la definición que hemos dado anteriormente y damos en nuestro Curso Libro Las Cuatro Leyes de la Mente Subconsciente y su Aplicación para Triunfar™  sobre la mente subconsciente como “programa de actos, pensamientos y/o emociones intensas que ejecuta acciones en cualquier persona y que obliga a seguirlos haciendo”, donde se ve claramente el poder y la influencia directa que tiene esta parte de la mente que controla el comportamiento humano en más de un 95%.

Para poder entender la importancia de la fe en la vida diaria es necesario explicar las claras limitaciones que como seres humanos tenemos y nos impiden conocer más allá de lo que ocurre en un tiempo presente también muy limitado.

NUESTROS SENTIDOS NOS ENGAÑAN

Cada ser humano viene a esta vida con cinco sentidos para tomar reconocimiento del mundo exterior: vista, oído, tacto, gusto y olfato. Estos sentidos tienen un rango de registro parcial o limitado y se encuentran en muchos casos muy por debajo del alcance que tienen otros seres en el planeta como los animales. Por ejemplo, un águila puede leer los títulos de un periódico a 100 metros de distancia, un ser humano escasamente a 2 y puede ver un ratón desde el aire a una distancia de 1 kilómetro, ningún ser humano puede ver nada parecido a un ratón a esa misma distancia. Un oso puede oler una comida a 30 kilómetros, nosotros a 10 metros como mucho y debe ser humeante para poderlo hacer. Los felinos como leones, tigres, jaguares, etc. pueden ver perfectamente en la noche; en cambio un ser humano sin luz le queda muy difícil desplazarse incluso en áreas que conoce bien. Los elefantes de otro lado pueden detectar con los pies sonidos de baja frecuencia a kilómetros de distancia como los de los maremotos y terremotos y que gracias a ello han salvado cientos de vidas humanas en lugares donde ellos habitan. En cambio el tacto humano no puede jamás hacer eso.

Por otra parte se sabe a nivel científico que como seres humanos contamos con una mente consciente que puede procesar un máximo de siete variables o trozos de información a un mismo tiempo y con un sistema nervioso que detecta una parte de la energía del medio entre mil millones.

Con estos simples ejemplos mostramos claramente que no podemos fiarnos de nuestros cinco sentidos para creer que sabemos perfectamente lo que está sucediendo en una pequeña porción del universo donde sea que nos encontremos en un momento determinado.

LA CIENCIA Y LA FE

Aunque muchos científicos han hecho y hacen alarde de sus descubrimientos y teorías, mucho de lo que han legado al mundo a través de las ciencias exactas como las matemáticas, la física, la química y otras no puede ser observado a simple vista, ni siquiera con un potente microscopio y se convierte en acto de fe para la inmensa mayoría de personas que no entienden la complejidad de tales asignaturas y que no les interesa tampoco saberlas. Por ejemplo, se sabe de la existencia del átomo y sus partículas elementales como protones, neutrones y electrones. Sin embargo, nadie ha visto jamás un solo átomo con sus propios ojos ni puede verlo tampoco con un microscopio y mucho menos a alguna de sus partículas; pero quedaría muy mal que alguien dijera que los átomos no existen solo porque no los puede ver con sus ojos o con algún instrumento de mayor visión microcópica, sabiendo que la ciencia ha demostrado que sí a través de aceleradores de partículas y cálculos complejos que solo pueden entender un grupo selecto de personas.

Muchos de los inventos actuales que el hombre utiliza actualmente se basan para su uso público en un acto de fe: la electricidad, las construcciones, la telefonía digital, la internet, el automóvil, los barcos, los trenes, los aviones, los computadores, las aplicaciones, las redes sociales, etc., porque la mayoría de la gente los utiliza sin tener ni la menor idea o muy poca información de como funcionan y confían en quienes los han hecho y los han puesto al servicio del público.

LA FE EN DIOS EL SER SUPERIOR

Solo porque el hombre no pueda demostrar la exitencia de Dios a través de sus limitados métodos de búsqueda y conocimiento, esto no quiere decir que no exista. El universo por ejemplo que es una creación de Dios nos supera siempre, de lo contrario no sería posible el progreso en ningún aspecto y esto hace que no podamos saber una infinidad de procesos que en el ocurren por segundo o en unidades de tiempo mucho menores y de los que no somos conscientes ni podemos serlo aquí, allá y más allá también.

Un cuerpo humano por ejemplo, está formado por aproximadamente treinta y siete billones de células. Y cada célula tiene alrededor de seis billones de reacciones por segundo. Un número de combinaciones fabuloso en su conjunto, de las cuales nadie puede registrar a nivel consciente, tampoco ver, escuchar o sentir.

Cualquier persona entonces que se da cuenta de la vastedad universal y de la limitación de sus sentidos sabe que debe haber una realidad muy superior detrás de la cortina de sus capacidades y que lo gobierna y diseña todo con perfecta sabiduría, no el universo que se crea solo como piensan algunos, sino un ser extremadamente poderoso y muy superior a nuestras capacidades humanas.

LA FE Y LOS MILAGROS

Existen cientos de miles sino millones de casos en el mundo que la ciencia no puede explicar sobre prodigios, curaciones y soluciones a los más variados temas y casos de la vida humana. Desde curaciones de enfermedades terminales muy graves en personas desauciadas, otras que caen de cientos o miles de metros en las alturas y sobreviven, relaciones destrozadas que se componen, personas sin ningún tipo de educación y dicriminadas que fijan una idea en su mente subconsciente y salen adelante haciendo que las circunstancias trabajen a su favor y consiguiendo logros económicos extraordinarios, adictos crónicos que dejan totalmente los vicios, criminales y delincuentes que se arrepienten y aborrecen sus antiguas prácticas, etc., todos estos casos tienen en común la apertura mental a un cambio extremo a través de la fe intensa, que gradualmente la persona acepta y va alimentando en su mente consciente y subconsciente, sin importar los hechos actuales y las circunstancias rodeantes. Como veremos en nuestro Curso Libro Las Cuatro Leyes de la Mente Subconsciente y su Aplicación para Triunfar™  el caso de una persona en estado de salud delicado y con carencias económicas que aprovechando las técnicas de conocimiento y aplicación de la mente subconsciente cambió radicalmente su estilo de vida.

Es claro también que en todos los casos de curaciones inexplicables, sanaciones interiores, logros extraordinarios, pacientes graves recuperados, quienes sobreviven a accidentes mortales, relaciones destrozadas que se componen, etc. reciben ayuda de una fuerza omnipotente, la fuerza de Dios que nos ayuda a todos a cada instante a vivir y a continuar nuestra misión en este mundo.

EL FENÓMENO OVNI Y LOS EXTRATERRESTRES

Recientemente la Marina de los Estados Unidos reconoció públicamente un video de Ovnis (Objetos Voladores no Identificados) donde estaban 5 o 4 de estos objetos encima de un buque de guerra. Esto dejó perplejos a muchos escépticos que se dieron cuenta de que el hombre no tiene el control de lo que sucede en el universo y que por el contrario en lugar de querer saberlo todo, debe aceptar los eventos que no puede explicar y darse cuenta por hechos como este que no somos la única especie en un universo tan grande y con tantos planetas y estrellas.

Este tipo de eventos confirmados resutan muy importantes para ampliar la esfera mental y eliminar pensamientos afirmados o paradigmas en la mente subconsciente que por efecto de la primera y segunda leyes que explicamos en nuestro Curso Libro Las Cuatro Leyes de la Mente Subconsciente y su Aplicación para Triunfar™ impiden creer en la vida en otros planetas o lugares del espacio exterior, y que una vez eliminados fortalecen la creencia y la fe en este y otros aspectos de la vida.

LA FE COMO ACTO DE HUMILDAD Y REVERENCIA

Tener fe es ante todo un claro reconimiento ante una realidad que nos supera a cada instante y con mucho. Esto no tiene nada que ver con el nivel de estudios que hayamos alcanzado, porque el conocimiento humano ayuda un poco a esclarecer las cosas pero siempre estando muy lejos de la verdad total. Ya lo dijo el propio Isaac Newton, una de las mentes más brillantes que han existido, padre de la física y creador del cálculo diferencial e integral «No sé lo que yo le parezca al mundo, pero en mi opinión solo he sido un muchacho que juega en la playa con una concha más pulida que otros mientras el inmenso océano de la verdad permanece inescrutable ante mi».

LA FE Y LOS SUEÑOS

La fe es sin duda el catalizador por excelencia para lograr los sueños y las metas en la vida. Todos los ganadores a todo nivel en la historia de la humanidad la han utilizado y lo seguirán haciendo porque nadie puede creer más en sus proyectos que ellos mismos, y en algún momento o en varios serán ellos únicamente los que podrán seguir creyendo en su idea, en su sueño o meta porque sencillamente nadie lo puede hacer como ellos y nadie puede ver hacia el futuro la idea cristalizada como ellos la pueden ver. Necesitamos entonces cultivar la fe para vencer siempre, porque el universo no es un lugar caótico que oprime y esclaviza a quienes lo habitan y como lo describimos en nuestro Curso Libro Las Cuatro Leyes de la Mente Subconsciente y su Aplicación para Triunfar™ a través de la cuarta ley de la mente subconsciente es posible que el y nuestra mente actúen en conjunto para lograr aquello que queremos siceramente realizar, pues no se trata de deseos vagos que no despiertan la fe y que no llevan a desarrollar compromisos para lograrlo.

MENTALIDAD DE ESCEPTISIMO Y POBREZA

Ser realista ante un modelo del mundo muy limitado como el que hacen nuestros sentidos y aceptar esa aparente realidad como un todo en la vida, estanca gravemente el progreso y trae como consecuencia atraso, pobreza y limitaciones en muchas áreas de la vida. Debido a la acción de las cuatro leyes de la mente subconsciente que explicamos en nuestro Curso Libro Las Cuatro Leyes de la Mente Subconsciente y su Aplicación para Triunfar™ una persona escéptica no tendrá posibilidad de lograr un mejor presente y futuro, hasta tanto no sea consciente de los pensamientos equivocados que aceptó como hechos inamovibles para su vida y que le obligan a seguir pensando igual y a mantenerse en una zona de confort alejada del cambio y el progreso.

LA MENTE SUBCONSCIENTE Y LOS RESULTADOS DE LA FE

Para una mente subconsciente bien entrenada a través información positiva que reprograme las creencias, eliminando las negativas y fortaleciendo las positivas, la situación va a ser completamente diferente. Como la mente subconsciente no cuestiona  críticamente la información que le llega, el hecho de aceptar un pensamiento de forma sostenida y reforzarlo con emociones positivas como alegría, júbilo, placer, tranquilidad, etc., pondrá en movimiento la cuarta ley de la mente subconsciente que explicamos en nuestro Curso Libro Las Cuatro Leyes de la Mente Subconsciente y su Aplicación para Triunfar™ trayendo como resultado la materialización del pensamiento afirmado y aceptado. Y esto no depende del nivel de estudio o instrucción, clase social, raza, edad o cualquier otro limitante personal porque para la mente subconsciente solo existen los límites que una persona acepte o se autoimponga.

Todas las personas que han triunfado en la vida como hemo dicho y no hablamos solo del campo económico, sino deportivo, social, académico, empresarial, espiritual, familiar, etc., tuvieron que hacer uso de la fe en muchos momentos de sus vidas porque no conocían todas las variables en juego que interactuaban en un momento determinado para obtener su meta particular. Sin embargo, crearon este estado interno de armonía con su sueño o meta, lo alimentaron, continuaron hacia adelante a pesar de todas las adversidades que encontraron y finalmente llegaron a la conquista de ese logro esperado y anhelado por tanto tiempo.

LA FE Y LA ACCIÓN

No puede haber una fe verdadera en algo o en algún evento en el futuro si no se traduce en acción en el presente y esta en resultados. La fe a nivel subconsciente siempre lleva a la acción y a concretar lo que se ha creado con anterioridad en la imaginación, por ejemplo a través de técnicas avanzadas como la visualización creativa, tema que abordaremos con detalle en el estudio de la cuarta ley que explicamos en nuestro Curso Libro Las Cuatro Leyes de la Mente Subconsciente y su Aplicación para Triunfar™ . Sin embargo, hay que diferenciar la fe de una simple creencia porque la fe asume un compromiso sin reservas con aquello que se cree y obliga a entrar en acción para concretar en el mundo físico los deseos ardientes, no simplemente a aceptar que un día las cosas pueden cambiar sin tener por uno mismo responsabilidad en los hechos.

¿Cómo mantener la fe en tiempos de crisis?

Actualmente la humanidad se enfrenta a problemas complejos: pandemias, pérdidas económicas y desempleo, pérdida de valores y principios fundamentales, escasez alimentaria, guerras, destrucción de los ecosistemas, malos gobiernos, personas que no toman el liderazgo de sus vidas y que esperan que otros les cambien la vida, crecimiento de la delincuencia, degradación social y moral, etc., todo esto lleva a pensar que el fin de la raza humana es inminente y que no podemos sobreponernos a tal cantidad de situaciones adversas, pero es en la adversidad donde precisamente la fe es puesta a prueba, no en tiempos de bonanza donde la mente suele adormecerse.

Como hemos explicado en artículos anteriores todo ser humano es un todo compuesto de cuatro partes o áreas fundamentales: espiritual, mental, emocional y física y cada una de estas áreas tienen necesidades independientes pero a la vez son interdependientes entre si. La fe no es entonces un estado aislado, solo espiritual o mental sino también emocional con consecuencias físicas.

En nuestro Curso Libro Las Cuatro Leyes de la Mente Subconsciente y su Aplicación para Triunfar™ ofrecemos varios métodos para fortalecer y desarrollar el poder de la fe, entre los cuales por nombrar algunos apartes, la parte espiritual requiere de una mayor comunicación diaria con Dios a través de la oración, la meditación y la lectura de libros como la Biblia, la parte mental a través de cursos de desarrollo personal como el nuestro para la transformación y el desarrollo mental y otras herramientas que ofrecemos a nuestro estudiantes, la parte emocional a través de contacto con los ambientes naturales y la parte física a través de rutinas de ejercicio diario moderado.

Hoy como nunca necesitamos del poder de la fe para recuperar y defender los valores y principios de una sociedad más justa y equitativa, sobreponernos a los reveses y obstáculos que trae la vida, pero también para lograr las metas y los sueños personales, ayudando y sirviendo a otros para formar un mundo más unido y obtener así un desarrollo social y un progreso sostenidos.

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